Aloina aloides

Familia: Pottiaceae

Forma céspedes más o menos laxos, pequeña. Las hojas imbricadas en seco tienen son patentes en húmedo, tienen filamentos clorofílicos sobre el haz de la hoja protegidos por el margen incurvado, el nervio termina en un mucrón. Los esporofítos son frecuentes, sobre todo en invierno y principios de primavera. Tiene una cápsula cilíndrica y dientes del peristoma filiformes retorcidos helicoidalmente. Se caracteriza porque la membrana basal del peristoma es muy corta (1-2 células).

Crece en todo tipo de suelos, es una especie bastante frecuente, se puede encontrar en el mortero de los muros o creciendo entre el pavimento de los jardines.

De Crossidium se diferencia por que este no tiene el margen incurvado y tiene pelo hialino. Junto con Aloina ambigua y A. rigida y A. brevirostris forman un grupo difícil de distinguir, es aconsejable observar varias plantas aunque pueden crecer mezcladas. Lo que caracteriza a A. aloides frente a estas tres es que el nervio termina en un corto mucrón y especialmente que la membrana basal del peristoma es muy corta (inapreciable con una lupa) frente a A. ambigua cuya membrana basal se ve claramente (5 células de altura). Las otras dos especies son mucho más pequeñas y tiene el ápice redondeado.